viernes, 16 de noviembre de 2012

entrevista a Javier Corvalán


entrevista a Javier Corvalán
Por Omar Paris para ArquiNoticias



Nace en Asunción en 1962. Es arquitecto por la Facultad de Ciencias y Tecnología de la UCA (1987).
Trabaja en forma independiente desde 1990 y eventualmente asociado a arquitectos amigos en concursos públicos o privados. En 1997 viaja a Roma para realizar cursos de restauro, donde estuvo como profesor invitado del Instituto Universitario de Arquitectura de Venecia hasta el 2006. También ha colaborado con la Escuela de Arquitectura de América Latina y el Caribe Isthmus y la Escola Da Cidade de São Paulo. Es docente de las cátedras de proyecto en la Facultad de Ciencias y Tecnología de la UCA y en la Facultad de Arquitectura de la UNA.



O.P: ¿qué es una casa?
J.C: Es la pregunta del millón, tal vez sea el origen de la arquitectura, aquel primer refugio que construyó el hombre contra la naturaleza...allí comenzó todo. Me gusta verlo así de una manera muy simple, aunque actualmente la evolución haga definiciones más complejas.

O.P: ¿te gusta hacer casas?
J.C: Si, no tengo ninguna preferencia por el tema, tampoco soy especialista. A propósito, pienso que es uno de los `

O.P: ¿qué pensás cuando te encargan una casa?
J.C: Pienso preguntas, de todo tipo. Qué, dónde, para quien, por qué, cómo, cuánto....
Nunca son claros los inicios, hay más incógnitas que certezas, el no saber qué hacer crea una necesidad de búsqueda y trato de no repetir las respuestas de otros trabajos.

O.P: ¿qué tendría que tener una casa? ¿hay recetas?
J.C: Creo que no debería haber recetas ni para cocinar, sólo sirven para la farmacia.
Una casa debería tener todo lo que pase por la mente, que sirva para dar una respuesta a las necesidades conscientes e inconscientes, no hay una regla. Hay una casa diferente por quien la pida y por cada lugar.

O.P: contanos sobre el proceso de la casa umbráculo... ¿cómo convenciste a tu cliente de hacer esa cubierta con pallets?
J.C: La cubierta de pallets fue lo poco que pudimos imaginar como respuesta a un presupuesto reducido y a la pretensión de una gran casa para Susana. Ella tiene un gran crédito en esto, no existen buenos proyectos sin buenos comitentes, no basta solo buenos arquitectos o constructores.
Ella depositó su confianza y nosotros le dimos una respuesta. La gente que se nos acerca por trabajos llegan con la mejor predisposición y con respeto a nuestro trabajo realizado, obviamente el laboratorio no está sepultado de encargos, tenemos lo suficiente para mantenernos ocupados y concentrados en nuestro sistema de trabajo bien personalizado. Es gratificante comprobar que mientras construimos las cosas, ellos se entusiasman tanto como nosotros, participan y colaboran.


“Creo que no debería haber recetas ni para cocinar, sólo sirven para la farmacia. Una casa debería tener todo lo que pase por la mente...”


O.P: ¿qué es el laboratorio? ¿Cómo funciona el laboratorio de proyecto? ¿Cuánto tiempo le dedicás a la búsqueda de nuevas posibilidades?

J.C: Un espacio de proyecto y experimentación, tiene la particularidad que un cuarto de su superficie ocupa un taller con pequeñas máquinas de carpintería y un patio donde soldar y colar hormigón. Los tiempos de trabajo son muy variables.

O.P: ¿cuánta gente trabaja en el laboratorio?
J.C: Hoy somos ocho, podemos llegar a 20 y en vacaciones solo tres

O.P: ¿què relación encontrás entre tu trabajo en la universidad y el de tu taller de arquitectura?
J.C: anteriormente nada. Hoy día, abrimos un nuevo taller que tratamos de aplicar nuestra experiencia de trabajo en colaboración con otros excelentes colegas amigos.

O.P: ¿qué les decís a los que están iniciando su camino en la arquitectura?
J.C: Que busquen el suyo, hay uno propio para cada uno...que el fin es hermoso,
Solano dice que la arquitectura es una idea positivista, solo está pensada para mejorar las condiciones...

O.P: ¿hay algo que te gustaría te pregunten y no lo han hecho? ¿qué contestarías?
J.C: Que me gustaría ser si no fuera arquitecto... Músico de jazz o director de cine.

O.P: ¿a, eso… El club de la serpiente… de qué se trata?
J.C: de muchas cosas, de una historia y un lugar...el nombre es un homenaje a Julio
Cortázar (a quien lo leí incansablemente). No es un invento nuestro. El escribía sobre un sitio donde se reunían a escuchar jazz... Te conté que me gusta el jazz y coincidió que adoptamos una Kurijú de más de dos metros como mascota. La pobre había sido abandonada en cautiverio en un acuario comercial de la ciudad. La serpiente andaba de brazo en brazo y a veces sobre la mesa entre papeles y planos.
Habíamos ganado el concurso de un acuario y pensábamos finalmente ofrecerle al acuario para que todos los niños puedan aprender de ella, pero como la mayoría de los concursos no se construyen...


“Busco dar respuestas a todos los verbos que experimenta un habitante en una casa.”

Si anteriormente te describí al laboratorio como un espacio donde el 25 % estaba ocupado por una pequeña carpintería, hay otro 10% ocupado por instrumentos musicales que suenan en cualquier momento, especialmente los viernes, sábados o cualquier siesta. El nombre de la banda es ¨El Club de la Serpiente¨.

O.P: ¿qué buscas cuando hacés una casa?
J.C: El verbo habitar sobre todo. Buscodar respuestas a todos los verbos que experimenta un habitante en una casa. En lo personal, aprender algo nuevo en cada una, me divierte. Es una condición que me impongo y a la vez ofrezco algo particular al que me pide.

O.P: ¿nos podés mencionar algo que aprendiste en las casas que hiciste? Casa curda…
J.C: A no hacer más de lo mismo, es un punto final.

O.P: casa umbráculo…
J.C: Un techo con pallets y sus consecuencias.


La casa umbráculo ha sido publicada en 30-60 Luz

O.P: casa en Surubi´i…
J.C: A construir con la gravedad y el equilibrio.

O.P: casa cuervo…
J.C: Artificios constructivos para desafiar normas municipales, ampliaciones y escaleras en el vacío fuera de linderos.

O.P: casa osypyte…
J.C: Construir un muro de 0.15m. de más de 70 m que se sostiene por sí solo.

O.P: ¿otras?
J.C: Tengo otras tres en construcción… después te cuento…




Para ampliar la información consultar en 30-60 n21 – CASAS 4
Colección: 30-60 cuaderno latinoamericano de arquitectura
Editorial: Editorial I+P, Córdoba, Argentina.
Precio Venta al público: $69,50
Donde adquirirlo: en www.30-60.com.ar (envíos a todo el país) y en librerías especializadas


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