Ubicación: Carrer de l'Empordà, Girona, España arquitectos encargados: Nacho Ferrer Orenga, Pepe Cortés Año: 2008 Fotografías: Lluís Casals
Surveyor: Alfons Brugué Soler Interiores: Marife Bellaubí Guardia, Laura Teres Soler, Nacho Umbert Barrera Diseñador Industrial: Yago Sarri Mata Estructura: Nb-35 en Barcelona Instalaciones: Pgi Girona Construcción: Y SA
La ubicación de la bodega es una respuesta a diferentes factores. Por un lado, tenía que estar cerca de los viñedos y de las dos construcciones existentes. Por otro lado, el diseño tuvo que tener en cuenta el aprovechamiento de la gravedad para el proceso de elaboración del vino. Y, por último, la intención debe hacerse hincapié en la búsqueda de la salida para la bodega las mejores condiciones naturales del terreno.
Sección 1
La bodega está dividida en tres cuerpos interconectados semienterradas que se extienden de manera gradual a través de una ladera orientada al norte. La orientación de esta pendiente y el paisaje de los techos de proteger el interior de la bodega de la luz solar excesiva, mientras que la pendiente del terreno facilita el posicionamiento de cada uno de los espacios en el programa.
El cuerpo superior se encuentra el espacio de recepción de la uva y contiene la bodega de elaboración de vinos. El nivel más alto de la pendiente se buscó establecer la plataforma de trabajo que se lleva en las uvas y por medio de la gravedad llena los tanques de esta bodega, situada en torno a cuatro metros por debajo del nivel de la entrada natural.
El cuerpo intermedio corresponde a la de almacenamiento y embotellado bodega. Cuenta con pasarelas de trabajo por encima de los tanques situados otros cuatro metros más abajo. La irregularidad permite que el jugo de viajar a través de la gravedad de los primeros tanques a las de este sótano. Esto es seguido por la bodega barril situada otra metros más abajo, donde goza de condiciones de humedad y temperatura adecuadas.
Por último, la parte inferior del cuerpo tiene una sola altura y contiene los materiales secos y tiendas de botella, el espacio de la oficina y la sala de recepción. Desde la recepción, un estrecho pasillo conduce a la sala de degustación equipado junto a las barricas.
La suite está concebido como una serie de muros de hormigón que, además de la definición de las rampas de acceso, configuran terrazas integradas en la pendiente. La división de los muros norte minimiza el impacto exterior de la dimensión real de las dos bodegas, permite la creación de amplios espacios en las entradas a las bahías y proporciona el acceso de la pavimentación de una continuidad con la cubierta ajardinada de la bahía situada debajo de ella.
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