domingo, 26 de agosto de 2012

Historia de la Avenida Alvear: El Palacio Dose


Historia de la Avenida Alvear: El Palacio Dose
publicado en miradaatenta
La siguiente publicación es producto del trabajo de investigación realizado por el editor de este blog, Lic. Pablo Chiesa, junto al Sr. Agustín Ilutovich, estudiante de arquitectura de la Universidad de Buenos Aires.
Decidimos hacer una serie de publicaciones sobre la historia de la Avenida Alvear, haciendo hincapié en las grandes residencias que se demolieron y las que aún se mantienen. Para ello habilitamos una categoría dentro del blog titulada "Historia de la Avenida Alvear", ubicada en la columna situada a la izquierda de su pantalla, en la que se irán archivando los diversos artículos que se hagan al respecto.
Comenzamos esta serie de publicaciones con la historia del "Palacio Dose", residencia del Dr. Carlos Dose y su familia, que se situaba en la esquina de la Avenida Alvear y la calle Ayacucho, y que fue construida por los arquitectos Jacques Dunant y Charles Paquín, autor el primero también de la estancia Huetel,  la Catedral de Mercedes y el Pabellón Carlos Malbrán del Instituto Bacteriológico de la Ciudad de Buenos Aires. Para más información sobre las obras de Dunant les recomendamos visitar el sitio del investigador Alejandro Machado: arquitectos-franceses-argentina.blogspot.com.ar
A continuación les enseñamos una fotografía aérea del Palacio Dose tomada en la década de 1930. Debajo, les colocamos un bosquejo que hicimos del plano de la planta noble de la residencia. Si bien el boceto tiene algunas imperfecciones y no figuran los salones internos, sirve para ubicarse espacialmente. Sobre el plano indicamos con una flecha roja el sector fotografiado del edificio:
Fuente: Archivo General de la Nación
La mansión, terminada aproximadamente en 1890, se trató de una de las primeras "grandes residencias" de la Avenida Alvear. Una revista publicada en la década de 1920 la describía así:
"Una de las bellezas arquitectónicas que adornan nuestra ciudad es la mansión del Señor Alfredo Zemborain y su esposa Doña Justa Dose. Es una copia fiel en pequeño del palacio de Francisco I, situado a pocos kilómetros de  París. El arreglo interior, de un buen gusto indiscutible, armoniza con la edificación de la casa, pues todo él obedece al estilo francés. Muebles, cuadros, platería, bronces, mármoles y maderas talladas, todo revela arte y riqueza. Los jardines son la nota alegre, con su arboleda abundante, y la magnificencia de las flores da al palacio la belleza de cada estación"
No obstante, las revistas sociales de la época, que no se especializaban en arquitectura, solían estar plagadas de imprecisiones, por lo que no se las puede tomar como una fuente fidedigna: El Palacio Dose no era una copia de un palacio de Francisco I, ni todo en él era francés. Las fachadas estaban inspiradas en el estilo Luis XIII, correspondiente a la transición entre el Renacimiento y el Barroco francés, que se caracteriza en uno de sus períodos, por la combinación y el contraste de ladrillos y piedras en las fachadas, como podemos observar en esta fotografía del Château de Balleroy construido en 1636:
Entonces comparen el trabajo de las fachadas del Château de Balleroy con las del Palacio Dose, que les mostramos en la siguiente fotografía. Debajo de la imagen colocamos el plano de la residencia indicando con una flecha roja el sector fotografiado:
Si bien las fachadas del edificio estaban inspiradas en el estilo Luis XIII, ésta no era una interpretación pura, sino ecléctica, como era característico en la arquitectura de finales del siglo XIX.
Debajo les enseñamos una fotografía del sector sureste de la residencia. Observen el mirador de la esquina, y el gran ventanal situado a la derecha que iluminaba la gran escalera de madera situada en el Hall. Debajo de la imagen colocamos el plano de la residencia indicando con una flecha roja el sector fotografiado:
Fotografía del sector noroeste de la residencia. Observen el jardín trasero de la mansión que se extendía a lo largo de la barranca, que desembocaba en la rivera del Río de la Plata. Debajo de la imagen colocamos el plano de la residencia indicando con una flecha roja el sector fotografiado:
Fotografía del acceso al palacio desde los jardines traseros que daban a la barranca. Debajo de la imagen colocamos el plano de la residencia indicando con una flecha roja el sector fotografiado:
Fotografía del acceso a la residencia desde los jardines traseros que daban a la barranca. La galería central, compuesta de tres arcadas, originalmente estaba abierta al jardín. Debajo de la imagen colocamos el plano del palacio indicando con una flecha roja el sector fotografiado:
Imagen del frente norte de la residencia que daba hacia la barranca. En ésta fotografía, tomada a los pocos años de haber sido inaugurado el edificio, se distingue la galería trasera abierta hacia el jardín. Es curioso observar en primer plano a una lavandera realizando sus tareas en la orilla del Río de la Plata, y a pocos metros de la "elitista" Avenida Alvear, exactamente donde ahora se encuentra la intersección de las calles Posadas y Ayacucho. Debajo de la imagen colocamos el plano del palacio indicando con una flecha roja el sector fotografiado:
Fuente: Archivo General de la Nación:
A continuación les enseñamos cuatro imágenes de una fiesta celebrada en la residencia en la década de 1920. La primera fotografía está tomada sobre la escalinata de acceso al palacio desde el jardín trasero que daba a la barranca:
Fotografía de la fiesta celebrada en los jardines de la residencia:
Fotografía de la fiesta celebrada en los jardines de la residencia. Figuran las señoras González Guerrico de Sastre, Hunter de Nelson, Hunter de Roca, y Hunter de Vivot; srtas. Acevedo y Tronquist:
Fotografía de la fiesta celebrada en los jardines de la residencia. Figuran las señoras Raquel Aldao de Rodriguez y María Luisa Bousom de Madero; señores Peró, Irondo y Fernández Guerrico:
______________Los Interiores______________
Como era común en las mansiones de la época que se inspiraban en la composición del "Grand Hôtel Particulier" francés, el Palacio Dose contaba con un subsuelo, una planta noble donde se ubicaban los grandes salones de recepción, un primer piso donde se distribuían las habitaciones familiares, y las mansardas donde se encontraban las áreas de servicio.
Fotografía de la galería de ingreso a la residencia, y al fondo se distingue el portón de entrada desde la Avenida Alvear. Observen el trabajo ornamental en los balcones, ménsulas y cornisas de la fachada. Debajo de la imagen colocamos el plano del palacio indicando con una flecha roja el sector fotografiado:
Fotografía de la escalera de acceso al Hall desde la galería externa. Se puede observar el trabajo ornamental en el cielorraso abovedado de la galería, y un grupo escultórico compuesto de las figuras de un querubín montado sobre una esfinge. Debajo de la imagen colocamos el plano de la residencia indicando con una flecha roja el sector fotografiado:
Fotografía de la escalera de madera del Hall, que servía como acceso principal al primer piso, donde se encontraban la habitaciones familiares. En el sector izquierdo de la fotografía se observa un biombo, que estaba realizado en cuero repujado sobre fondo dorado, y una lámpara de madera tallada:
Fotografía de la gran chimenea de madera tallada del escritorio:
Fotografía de la vitrina ubicada en uno de los salones de recepción, que contenía una colección de divinidades en porcelana china:
Fotografía del comedor, que estaba decorado con boiseries estilo Luis XVI, consolas de mármol y bronce, tapices, y sillones estilo Luis XV:
La casa decoradora Waring y Gillow estuvo a cargo de la construcción del Gran Salón y la Salita que se emplazaban en la planta noble de la mansión. Afortunadamente encontramos la descripción de esos dos ambientes, hecha por la propia casa decoradora:
"Espléndidos Salón y salita, construidos por la casa decoradora Waring Y Gillow en el Palacio del Doctor Carlos Dose [...] Las dos obras con que engalanamos esta página son admirables y merecerán sin dudas el aplauso de los entendidos. Ambas son del más puro estilo Georgian, de la 2a época. En la decoración del gran salón, predominan los colores verde y oro, siendo los cortinados de rico raso color de rosa y los paneles, de valioso damasco de seda. En el friso se ve un juego de pinturas decorativas de gran efecto, y tras la cornisa, alrededor de la habitación, la luz se ha dispuesto de manera difusa, cual si viniera de lo alto, tamizada. El moblaje es todo dorado y aunque el colorido de las pinturas es fuerte, tal como corresponde a su estilo, es, sin embargo, armonioso, adquiriendo el conjunto, majestuoso aspecto, característico de ese arte, poco difundido en estos países.
La salita se halla separada del salón por una gran arcada y un piso de más alto nivel, dándose acceso a la misma por medio de dos escalones. La decoración de esta salita ha sido tratada de la manera más original, pues es una combinación del Arte Oriental con la decoración inglesa del siglo XVIII. 
Las paredes están decoradas hasta la altura de tres metros, con un friso continuado de antiguos paneles de laca chinesca, y el espacio entre este friso y la cornisa, se halla tapizado de raso negro, que entona maravillosamente con el fondo obscuro de los paneles de laca. Tanto las cortinas como el tapizado del piso, es de color violeta. Nótase también, una espléndida chimenea de mármol, sobre la que existe un espejo ricamente tallado y plateado antiguo. El cielo raso es de forma cupular y la parte de madera de nogal lustrado. El efecto general de esta salita es tranquilo, como para hallar en ella la serenidad sedante, deseada por la inteligencia que medita, por el espíritu que anhela la penumbra y el silencio, y forma contraste amable con el intenso colorido del gran salón, formando, así, ambas piezas, un complemento ideal, en una perfecta armonía de matices.
Esta obra merece, pues, el homenaje de un triunfo para la Casa Waring y Gillow, y se lo presentamos, como un estímulo a sus esfuerzos que tanto dicen en pro de la cultura bonaerense."
A continuación les enseñamos una imagen de los ambientes decorados por Warrin y Gillow, y debajo de ésta colocamos el plano de la residencia indicando en rojo la ubicación del "Gran salón" y en turquesa la de la "Salita". Una  flecha roja indica en qué sentido está orientada la imagen:
Fotografía de la salita en la década de 1920. Como podemos observar, con el pasar de los años mantuvo su decoración original aunque los muebles fueron cambiando de lugar. Debajo de la imagen colocamos el plano de la residencia indicando en rojo la ubicación del "Gran salón" y en turquesa la de la "Salita". Una  flecha turquesa indica en qué sentido está tomada la fotografía:
Fotografía de la sala de estar decorada con boiseries de madera, entelados de damasco, mobiliario francés estilo Luis XIV y Luis XV, y mobiliario inglés estilo Reina Ana:
______________La Demolición______________
Con el pasar de los años la Avenida Alvear fue cambiando su fisonomía, pasando de los grandes palacios a los inmensos edificios de departamentos. En consecuencia, la mansión quedó notablemente disminuida en escala al lado de sus nuevos vecinos. En la siguiente fotografía, tomada a mediados de la década de 1930, podemos observar que el sector del jardín de la residencia que se extendía sobre la barranca, fue loteado, y encima se construyó un edificio de rentas diseñado por el arquitecto Alejandro Bustillo para la madre de Victoria Ocampo; y en la cuadra lindera al Palacio Dose se observa al recientemente inaugurado Hotel Alvear:
Fuente: Archivo General de la Nación
Finalmente, en 1938 se demolió la mansión y se terminó de lotear el terreno. Debajo les enseñamos una fotografía tomada luego de la demolición, y con un círculo rojo indicamos el espacio que ocupaba el palacio:
En la actualidad en el terreno donde se encontraba esta pintoresca residencia se levantan varios edificios de departamentos:
Fotografía tomada del sitio:  arquitectos-franceses-argentina.blogspot.com.ar

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios sobre la nueva entrada