Los legendarios puentes de Madison, en peligro por recortes de presupuesto
WASHINGTON (AP) -Los puentes techados de madera hechos famosos por la película “Los Puentes de Madison”, de Clint Eastwood, van a desaparecer como consecuencia del paso del tiempo y de la reticencia de las autoridades a costear sus reparaciones.
En la actualidad sobreviven apenas seis de los 19 puentes originales del siglo XIX del condado de Madison, Iowa. Inundaciones, incendios y desidia están acabando con ellos en todo el país.
El presupuesto del presidente Barack Obama para 2012 implica recortes para rehabilitarlos: eliminación de 55 programas del Departamento de Transporte, incluido el de Preservación de Puentes Techados Históricos. El programa distribuye 8 millones de dólares anuales para reparar o rehabilitar una docena de puentes techados.
Esa suma representa un porcentaje ínfimo del presupuesto federal de 3.800 billones de dólares.
Aunque el gobierno nacional no está en condiciones de costear estas reliquias del pasado, el Departamento de Transporte dio a conocer que las comunidades podrán solicitar subsidios para los puentes. El inconveniente es que deberán competir con otros proyectos de mejoras de puentes y carreteras que probablemente tengan mayor prioridad.
La perspectiva de conseguir esos subsidios disminuye más todavía si se tiene en cuenta el peso que han adquirido los republicanos en el Congreso, que tienen una definición más limitada de un gasto justificado.
El presidente de la Sociedad Nacional para la Preservación de Puentes Techados, David Wright, está de acuerdo en que hay que reducir los gastos del gobierno. Sin embargo, considera que los puentes son “tesoros nacionales” que hay que preservar, y que no se pueden abandonar. “Tal vez hay que asignar partidas más bajas, de 4 millones de dólares en lugar de 8. No sé. Pero no creo que se deba negar dinero”, especuló.
Los propios funcionarios municipales a cargo de los puentes del condado de Madison, no obstante, dicen que hay necesidades más imperiosas. El jefe de ingenieros del condado y director del programa de puentes techados, Todd Hagan, afirmó que es más imperioso recibir fondos para pavimentar carreteras que para reparar los puentes techados.
Inundaciones, actos de vandalismo, incendios y la desatención están acabando con los puentes en todo el país.
Las perspectivas de conseguir fondos para reparar puentes techados fuera de la esfera del gobierno nacional son muy limitadas, según los grupos que luchan por preservarlos.
“Adoro los puentes”, expresó Isabel Sawhill, economista de la Brookings Institution, “pero no creo que su preservación sea responsabilidad del gobierno federal”.
Hay ocho puentes techados por donde pasan ferrocarriles en el mundo, todos ellos en Estados Unidos, según Wright. Cinco en New Hampshire, dos en Vermont y uno en Oregon.
Algunos puentes techados todavía se usan, mientras que otros han pasado a ser objetos decorativos o atractivos turísticos , ya que la gente prefiere los puentes de acero.
El administrador municipal de Lancaster, Edward Samson, dijo que la reparación de los puentes es importante “no sólo por lo que representan para el tránsito local, sino también por su impacto en el turismo, que es enorme”.
Admitió, no obstante, que casi siempre hay que elegir entre reparar cañerías de desagüe o puentes, y que la prioridad la tienen las cañerías.
Tan sólo unos 750 de los 15.000 puentes techados construidos en el siglo XIX siguen con vida. Un camionero que quiso cruzar el histórico puente techado de Mt. Orne en Lancaster, New Hampshire, el año pasado, produjo graves daños a la estructura. Un tornado acabó con el puente de Moscow, Indiana, construido en 1886, que fue a parar a las aguas del río Bib Tlatrock hace tres años.
Los puentes techados fueron construidos en una era en la que abundaba la madera y resisten mejor que los de piedra los ciclos de congelación y deshielo típicos de las regiones frías del noreste y del centro del país. Los puentes de madera pueden durar 100 años o más si son debidamente protegidos y es por ello que se incorporaron techos. Pero al igual que una casa o un establo, tienen que recibir mantenimiento.
Con frecuencia los techos eran pintados con los colores de los establos para que los caballos no fuesen reticentes a cruzarlos, según un portal del condado de Parke, en Indiana. El condado se describe como la “capital mundial de los puentes techados”.
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